el mismo sol que ahora contemplas
se llevará la luz en el ocaso
como un amanecer doliente y abatido
no devolverá al otoño el calor con su
constancia
ni limpiará la pena esta fina y lenta lluvia
no dejará huella mi pie sobre tu piedra
pasará inadvertida
como rumor de hojas
hojas caídas
así escribe el tiempo su derrota